Siente Ribadesella, el alma de Asturias
La playa de Ribadesella, también conocida como la Playa de Santa Marina, es un impresionante arenal en forma de concha que combina la belleza natural del mar Cantábrico con una elegante arquitectura de época. Flanqueada por un amplio paseo marítimo y rodeada de villas indianas y montañas verdes, esta playa es perfecta tanto para relajarse bajo el sol como para practicar deportes acuáticos. Su cercanía al casco histórico y a enclaves como las Cuevas de Tito Bustillo la convierten en un lugar ideal para disfrutar del paisaje, la cultura y la tranquilidad asturiana en un solo destino.
El puerto de Ribadesella es el corazón marinero del municipio, donde tradición y vida cotidiana se entrelazan en un entorno pintoresco y lleno de autenticidad. Barcos de pesca y embarcaciones recreativas comparten espacio en este enclave que aún conserva el alma de un pueblo ligado al mar. A su alrededor, los bares y sidrerías invitan a saborear la gastronomía local con vistas al muelle, convirtiéndolo en un lugar ideal para pasear al atardecer y respirar la esencia de la villa.
El paseo marítimo de Ribadesella, que bordea la Playa de Santa Marina, es una de las joyas urbanas del norte de España. Flanqueado por majestuosas villas indianas, su recorrido permite disfrutar del contraste entre el azul del Cantábrico y la arquitectura de principios del siglo XX. Ideal para caminar, correr o simplemente sentarse y contemplar el paisaje, este paseo ofrece una experiencia relajante con el sonido de las olas como banda sonora.
Camina, respira, contempla… estás en Ribadesella.
El puente sobre el río Sella es otro símbolo de Ribadesella. Une la zona histórica con la parte más moderna del pueblo, creando una conexión perfecta entre tradición y actualidad. Desde él se pueden disfrutar vistas espectaculares del río, la ría y las montañas que abrazan la localidad. Además, durante la famosa fiesta del Descenso del Sella, este puente se convierte en punto clave para vivir el evento más vibrante del verano asturiano.
En lo alto del monte Corberu, la ermita de la Virgen de Guía corona el paisaje con su silueta blanca, vigilante del mar y protectora de los marineros. Desde allí, las vistas panorámicas son sencillamente espectaculares: la playa, el puerto, el Sella y la villa se extienden a los pies del visitante. Este pequeño santuario, cargado de historia y devoción, es también un lugar perfecto para detenerse, respirar hondo y conectar con la espiritualidad y la belleza natural de Ribadesella.
Ribadesella, punto de partida ideal para descubrir parajes únicos a pocos kilómetros.
Ribadesella no solo enamora por su belleza, sino también por su privilegiada ubicación. En pocos kilómetros a la redonda, el visitante puede descubrir joyas naturales como los Bufones de Pría, los Acantilados del Infierno o la majestuosa Basílica de Covadonga. Un destino perfecto para explorar lo mejor de Asturias sin recorrer grandes distancias.
Esto es solo una parte de Ribadesella...
La Cueva de Tito Bustillo es uno de los tesoros arqueológicos más importantes de Europa, reconocida por su impresionante colección de arte rupestre paleolítico. Situada a pocos minutos del centro de Ribadesella, ofrece un viaje al pasado de más de 30.000 años a través de pinturas y grabados que muestran la vida y las creencias de nuestros antepasados. Junto a ella, el Centro de Arte Rupestre permite al visitante comprender el contexto y la magnitud cultural de este yacimiento declarado Patrimonio de la Humanidad.
Muy cerca se encuentra el área recreativa de Ardines, un espacio natural ideal para relajarse tras la visita a la cueva. Con zonas de picnic, miradores y senderos, este enclave elevado ofrece vistas espectaculares sobre Ribadesella, el estuario del Sella y la costa cantábrica. Es un lugar perfecto para disfrutar de la naturaleza en familia o hacer una pausa rodeado de bosque y tranquilidad, con la silueta de la ermita de la Virgen de Guía en el horizonte.
Para quienes buscan paisajes más salvajes, los acantilados de Tereñes son una parada obligada. Este tramo de costa abrupta ofrece caminatas entre prados verdes y vistas imponentes del Cantábrico, además de la posibilidad de observar huellas de dinosaurios fosilizadas en los estratos rocosos. La combinación de mar, historia geológica y vistas infinitas convierten a Tereñes en uno de los rincones más sorprendentes y menos conocidos de Ribadesella.
Y para pasarlo bien y desconectar
El Descenso Internacional del Sella, celebrado cada agosto entre Arriondas y Ribadesella, es una de las competiciones de piragüismo más emblemáticas del mundo y una auténtica fiesta del deporte y la tradición asturiana. Más allá del evento, el descenso del Sella se ha convertido en una popular actividad de turismo activo disponible durante todo el verano, donde visitantes de todas las edades pueden disfrutar de una jornada inolvidable remando entre paisajes verdes, rápidos suaves y la magia del río en un entorno seguro y lleno de diversión.
Ribadesella también es un destino destacado para los amantes del surf, gracias a las olas constantes y la amplitud de la Playa de Santa Marina. Escuelas locales ofrecen clases para todos los niveles, desde principiantes hasta surfistas experimentados, lo que convierte a la villa en un lugar ideal para iniciarse o perfeccionar la técnica. Además, durante el año se celebran campeonatos y eventos que reúnen a surfistas de distintos puntos del país, aportando un ambiente vibrante y deportivo a esta localidad costera.
Turismo Asturias
Portal de turismo del Principado de Asturias
Turismo Ribadesella
Portal de turismo de Ribadesella
